La indiferencia, soberbia y negligencia son pecados que ningún líder debería cometer, especialmente cuando se trata de representar a una comunidad necesitada de oportunidades y desarrollo como lo es Neiva. Lamentablemente, el alcalde de Neiva, Germán Casagua, ha encarnado estos despreciables rasgos en su trato hacia la gente, en este caso contra el reconocido periodista deportivo Faiver Hoyos Hernández, quien intentó por todos los medios que los Juegos Nacionales ACORD se quedaran en Neiva, pero Casagua, muy a su estilo de emperador, lo ignoró.
El relato de Hoyos Hernández en su columna de hoy, publicada en Diario del Huila, revela una historia de promesas incumplidas, citas ignoradas y comunicaciones desatendidas. Un testimonio que pinta lo que es el alcalde Casagua, quien con su soberbia desmedida, desperdició una oportunidad de oro para el progreso de Neiva y su gente.
Cuando Faiver Hoyos se acercó al entonces candidato Casagua en busca de apoyo para que Neiva fuera la sede de los Juegos Nacionales ACORD, recibió una respuesta favorable. Sin embargo, las palabras del alcalde se desvanecieron en el aire cuando llegó el momento de cumplir con su compromiso y todo porque se le subió el poder a la cabeza. Las llamadas insistentes y los mensajes quedaron sin respuesta, dejando a la ciudad sin la posibilidad de oro de conseguir unos recursos importantes.
La falta de respuesta del alcalde Casagua no solo refleja una falta de respeto hacia un líder deportivo reconocido nacionalmente, sino también hacia los más de 600 periodistas-deportistas que podrían haber llegado a Neiva, brindando un impulso económico invaluable a una ciudad golpeada por el desempleo y la pobreza. Taxistas, hoteleros, dueños de restaurantes, comerciantes locales; todos habrían visto en estos juegos una oportunidad para salir adelante, para respirar un poco de aire fresco en medio de la adversidad.
Pero la soberbia e indiferencia del alcalde arruinaron esa posibilidad. Su falta de visión, su incapacidad para ver más allá de su propio ego, han condenado a Neiva a seguir esperando en la fila mientras otras ciudades se llevan los laureles del progreso.
El contraste con la actitud de líderes como la Gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, y su equipo, es abrumador. Mientras Neiva languidece en la espera, Ibagué y el Tolima se preparan para recibir con los brazos abiertos a los protagonistas de los Juegos ACORD, demostrando que el compromiso y la voluntad política pueden marcar la diferencia.
Es hora de que los neivanos exijan cuentas a su alcalde. Es hora de que la voz de la indignación se eleve por encima del silencio cómplice. No podemos permitir que la soberbia y la negligencia de unos pocos sigan afectando el destino de toda una ciudad. Neiva merece más que promesas vacías y líderes ausentes. Neiva merece un futuro digno, y es responsabilidad de todos luchar por él.
Invito a los neivanos a pensar en un proceso de revocatoria, pues Neiva no aguanta otros cuatro años de mal gobierno.
Les dejó a mis lectores el link de la columna escrita por el colega Faiver Hoyos: https://diariodelhuila.com/realidad-de-los-juegos-acord/